10 juin 2024 | COLOMBIAN NEWS

  1. Petro prohíbe exportar carbón a Israel “hasta que detenga el genocidio”
  2. Carbón: nuevo golpe de Petro a Colombia
  3. La izquierda y el antisemitismo es una vieja historia

Petro prohíbe exportar carbón a Israel “hasta que detenga el genocidio”

El Colombiano, Medellín
https://www.elcolombiano.com/colombia/presidente-petro-ordeno-suspender-exportaciones-carbon-a-israel-PD24728564
Revista Semana, Bogotá
https://www.semana.com/economia/macroeconomia/articulo/asi-es-el-plan-del-gobierno-nacional-para-suspender-la-exportacion-de-carbon-a-israel-este-es-el-proyecto-de-decreto/202410/
8 de junio de 2024

El gobierno de Colombia dio a conocer un borrador de decreto con el que busca suspender la exportación de carbón a Israel. Gustavo Petro dijo en su cuenta de X que esta suspensión irá “hasta que detenga el genocidio”.

Esa decisión de la Casa de Nariño escala aún más en las deterioradas relaciones entre las dos naciones, cuyo punto más complejo fue la ruptura de nexos diplomáticos por parte de Bogotá en mayo pasado, a raíz de la arremetida militar israelí contra Hamas en Rafáh.

La Asociación Colombiana de Minería (ACM) expresó esta semana su preocupación por el inminente cese de las exportaciones de carbón a Israel, dado que Israel es un importante socio comercial en este rubro. “Este tipo de medidas debe sopesar las implicaciones económicas y sociales para el país y las regiones. Israel es un destino clave para las exportaciones de carbón térmico de Colombia, representa en impuestos, regalías y contribuciones $650 mil millones cada año, de los cuales más de $100 mil millones van directamente a las regiones de La Guajira y el Cesar”, señaló el gremio en un comunicado.

El anunció de Petro coincidió con las acciones adelantadas hoy por Tel Aviv en el campamento de refugiados de Nuseirat, en donde las tropas israelíes rescataron a cuatro rehenes que estaban secuestrados por el grupo terrorista Hamás. En la operación murió un oficial de inteligencia israelí y 150 miembros de Hamas. Gustavo Petro jamás rechazó la masacre antijudía (pogrom) del 7 de octubre de 2023 donde Hamás, ayudado por el grupo Djihad islámica, asesinó a cerca de 1.200 civiles de los kibutz y convirtió en rehenes a otras 251 personas más por ser judíos, de los cuales 116 siguen desaparecidos y 41 han muerto. Esa masacre desató la nueva guerra entre Israel y Hamas en Gaza.

Semanas antes, el jefe de Estado ya había ordenado la suspensión de las compras de equipos militares a Israel, país que es uno de los principales proveedores de la Policía y las Fuerzas Militares colombianas y le puso fin a una relación de casi 70 años. Con la ruptura de las relaciones con Israel, Petro le cierra a Colombia un mercado de casi US$500 millones al año. La industria militar y química de Colombia serían las más afectadas por la orden de Petro. Si se promedian las ventas externas de Colombia a Israel desde 2020 hasta 2023, el valor de esas exportaciones pondera los US$452,3 millones. Durante 2023, Colombia exportó a Israel más de US$499,2 millones. En 2022, los intercambios comerciales entre los dos países subieron a US$1.000 millones. Colombia le vende a Israel combustibles, aceites minerales y sus derivados. La ruptura también afecta al agro. Según el Dane, café, té y especias, son la segunda categoría que compra Israel.

La prohibición de exportar carbón a Israel incluye:

1.-Las mercancías que estén amparadas con una Solicitud de Autorización de Embarque debidamente presentada y aceptada por la Dian, o con un Formulario de Movimiento de Mercancías debidamente autorizado por el usuario operador.

2.-Las Sociedades de Comercialización Internacional autorizadas que se hubiesen expedido el Certificado al Proveedor.

3.- Los negocios jurídicos perfeccionados hasta el 30 de abril de 2024, que generan una expectativa legítima o una situación jurídica consolidada para el exportador.

El mandatario colombiano no ha respaldado directamente al grupo terrorista Hamás, ha mostrado su apoyo al pueblo palestino y ha emitido fuertes críticas contra el estado de Israel. De hecho, Petro decidió romper relaciones diplomáticas con Israel, al que califica como un “gobierno genocida”.

Facsímil del decreto: https://www.semana.com/economia/macroeconomia/articulo/asi-es-el-plan-del-gobierno-nacional-para-suspender-la-exportacion-de-carbon-a-israel-este-es-el-proyecto-de-decreto/202410/


La izquierda y el antisemitismo es una vieja historia

Por Jean Numa Ducange
Revista Marianne, París
https://www.marianne.net/agora/analyses/blum-traite-de-reptile-repugnant-par-thorez-la-gauche-et-l-antisemitisme-une-vieille-histoire
Traducido por Colombian News
2 de junio de 2024

Es difícil negar el resurgimiento actual del antisemitismo que atraviesa importantes sectores de la sociedad francesa. Históricamente anclado en la derecha conservadora, el antisemitismo siempre ha contado con los “favores” de la izquierda. Lo que ocurre hoy lo demuestra contundentemente (1). Para comprender eso vale la pena retornar un poco sobre la historia de León Blum. En 1936, él se convirtió en el primer socialista que gobernó en Francia. Alabado y calumniado, él se convirtió en blanco de todo tipo de ataques por ser socialista, pero sobre todo por ser judío.

El antisemitismo sufrido por León Blum, presidente del Consejo (entonces jefe de gobierno) entre 1936 y 1937, procedía en gran medida de la izquierda. El hecho que los políticos de izquierda estén hoy dispuestos a jugar la carta del antisemitismo para desacreditar a sus adversarios no es algo nuevo.

En 1936, la derecha nacionalista, a la cabeza del partido Acción Francesa, de Charles Maurras, derramó su odio sobre León Blum, el nuevo presidente del Consejo que acababa de ganar las elecciones. Al frente de una amplia coalición que iba de la centro-izquierda hasta los comunistas, el “Frente Popular” de Blum impulsó una política ambiciosa, mucho más de lo previsto en su programa.

Blum, un “reptil repugnante” según los comunistas

Las huelgas masivas de trabajadores llevaron al gobierno a aprobar varias medidas, como las vacaciones remuneradas. En ese contexto, Charles Maurras escribió el 9 de abril de 1935: “Blum es un hombre al que hay que fusilar, pero por la espalda.” Antes de reincidir el 15 de mayo de 1936: “A Blum debemos verlo como judío, como lo debemos concebir, oír y abatir.” Son comentarios que parecen asombrosos para el lector del siglo XXI. Sin embargo, la violencia verbal —a veces seguida de ataques físicos— era entonces relativamente común.

La derecha antisemita quería ver en Blum la confirmación de sus fantasías: estimaban que la tradición revolucionaria y republicana había llevado a un judío a la cabeza del país. Maurras y otros no olvidaban la lucha de Blum por el capitán Alfred Dreyfus, un militar condenado injustamente por ser judío. Ver a Blum al frente del país fue una auténtica pesadilla para ellos. También, durante todo el período en su gobierno, Blum tuvo que sufrir un estallido de ataques antisemitas.

Eso fue sin duda una marca de la derecha “dura”. Porque cuando Blum fue juzgado por la izquierda del Partido Socialista y por las minorías trotskistas, no surgió aparentemente ningún antisemitismo en sus comentarios. Lo que les molestaba era su rechazo a la revolución social como ellos la entendían. Pero del lado del PCF, su aliado y luego su adversario, las cosas cambiaron. La ruptura de la coalición del Frente Popular y el deterioro de la situación social rápidamente convirtieron a Blum en un blanco de los comunistas, que lo veían como un traidor.

A principios de 1940, el secretario general del PCF, Maurice Thorez, publicó un texto: “Blum tal como él es” en un contexto muy tenso. No hay allí antisemitismo explícito, pero en ciertas formulaciones —que ciertamente parecen palabras amables si se las compara con la violencia de las expresiones de Maurras— describen a Blum como un personaje con orígenes obscuros, tortuosos y perversos. Respecto a sus “camaradas” socialistas, Thorez afirma que ellos “bloquearon el camino a otros y llenaron los periódicos, que se autodenominaban órganos del pueblo, de su diletantismo decadente”, antes de describir a Blum como “una especie de animal devorador del pensamiento, un instinto de gusano” o incluso un “reptil repugnante”

Caricaturizado como judío en la prensa del Partido Comunista

Se podía creer que después de 1945 habría una relativa calma. Todos sabían que León Blum había sido arrestado, encarcelado y deportado por los nazis. Pero el hombre que volvió a ocupar la escena política (De Gaulle soñó incluso con verlo a su lado en el gobierno durante la Liberación) después del cierre de los campos de exterminio tuvo que sufrir de nuevo ataques aterradores. Eso ocurrió en 1946 cuando volvió a ser jefe de gobierno. Poco antes, él había dirigido las negociaciones en nombre de Francia con Estados Unidos sobre ayuda financiera del Plan Marshall para la reconstrucción del país.

Una de las condiciones de Washington consistió en pedir que fuera facilitada la llegada del cine estadounidense a Francia: fueron los llamados acuerdos Blum-Byrnes. Eso provocó una protesta a nivel político y una reaparición del antisemitismo. Como era de esperar, la derecha nacionalista retomó sus viejas antífonas contra los judíos. Después de la Liberación esa derecha nacionalista había quedado terriblemente debilitada y desacreditada, y mucho menos audible que antes de la guerra.

La gran noticia fue el crecimiento del PCF, que llegó a ser en esa época el mayor partido en Francia, superando incluso al Partido Socialista. Durante varios años, el PCF se enfureció contra Blum: ya no se trataba de intentar construir un frente amplio con él, sino de destruirlo políticamente. Él y los demás socialistas fueron ridiculizados. Entre las víctimas de esa campaña estuvo Jules Moch, un amigo cercano de Blum que fue ministro del Interior desde 1947. Moch reprimió violentamente los ferroviarios, a quienes despidió en masa, lo que podría ser normal en un contexto donde las huelgas y los conflictos provocaban víctimas, en un país que había sido asolado por la guerra y la ocupación nazi. Las denuncias indignadas contra Moch se multiplicaron.

Pero la crítica política en las columnas de la prensa comunista cayó en el antisemitismo. Moch fue calificado de “nazi”, comparado al Reich de Hitler, o caricaturizado con una nariz larga, en alusión directa a su carácter judío. León Blum corrió una suerte similar y fue descrito como “el gran arquitecto de la traición”. Todo eso solo dos años después del descubrimiento de Auschwitz…

El “socialismo de los imbéciles”

Por supuesto, no debemos confundir todo: la intensidad del antisemitismo no es la misma en todos los campos políticos según la época. Pero debemos poner fin a la leyenda mantenida por algunos que limitan el antisemitismo a la historia de la derecha nacionalista, reduciendo eso a unos cuantos errores desafortunados de la izquierda. Existe efectivamente un “socialismo de los imbéciles”, frase acuñada por el socialista August Bebel, el gran líder de la socialdemocracia antes de 1914, que había comprendido perfectamente en Alemania en aquel momento cómo algunas personas confundían alegremente la lucha contra el capitalismo y la lucha contra los judíos.


(1).- Nota de CN: el autor se refiere al auge electoral del partido La France Insoumise (LFI), dirigido por Jean-Luc Mélenchon. Ese partido es acusado por sus adversarios, pero también por la prensa y los analistas políticos, de ser uno los principales responsables del auge del antisemitismo en Francia, disfrazado de posiciones anti sionistas y anti-Israel, y un aglutinante electoral del islamo-izquierdismo.