5/02/2024 | Por Guillo | IFM Noticias

Petro ha perdido la cordura y ha caído en una constante paranoia, viendo golpes de Estado y conspiraciones donde no las hay. El poder se le ha convertido en su peor pesadilla.

Lo que los colombianos presenciaron ayer fue embarazoso y dejó al descubierto el estado de salud mental de un presidente iracundo y paranoico que pasó el día discutiendo en solitario contra la cuenta falsa del Fiscal Barbosa y enviando alertas de ‘golpe de Estado’ en varios idiomas. La situación, lejos de causar alarma, provocó miles de risas y meses.

Lo que llama la atención es que quienes hace tan solo tres años estaban incendiando las calles, diciendo “DUQUE CHAO” y creando abiertamente un escenario de violencia para provocar un rompimiento institucional en el país, hoy están en un estado de alerta permanente y avizorando rompimientos institucionales que no existen.

¿Que la Fiscalía está investigando a Petro? Sí, pero no significa un rompimiento institucional. De hecho, en marzo de 2020, la Fiscalía General abrió una investigación a la campaña del entonces presidente Duque por presuntos ingresos ilícitos provenientes del ‘Ñeñe’ Hernández. Igualmente, el CNE hizo lo propio e investigó la campaña del entonces presidente. En ese momento, el mismo petrismo que hoy hace creer que investigar a Petro es llamar a un golpe de Estado celebraba que las instituciones investigaran a Iván Duque.

A Petro y a su séquito se les está devolviendo una parte de todo el veneno que escupieron durante el cuatrienio anterior. No olvidemos que Gustavo Petro llamó en 2019 y en 2021 a la “rebelión” y a la “desobediencia civil” contra el Gobierno de Duque. ¿Qué pasaría si en la actualidad un líder de la oposición llama a la “desobediencia civil” contra el Gobierno de Gustavo Petro?

Además, abiertamente vimos al actual mandatario de los colombianos decir que Duque era un presidente ilegítimo por haber sido elegido, presuntamente, con dinero del ‘Ñeñe’ Hernández. Cuando él lo decía, no significaba una amenaza alguna al rompimiento institucional, pero ahora que el propio Nicolás Petro CONFESÓ que a la campaña de su papá ingresaron dineros ilícitos, no se le puede adelantar una investigación porque eso sería darle un golpe de Estado. Increíble el doble rasero.

Es imposible olvidar cuando Petro estaba en la oposición y pedía a los padres de familia que no enviaran a sus hijos a la escuela, que no pagaran servicios públicos y les sugirió el no pago de impuestos. ¿Qué pretendía? ¿Provocar un colapso económico del Estado que condujera a una situación que forzara la renuncia de Duque o un golpe de Estado?

Además, imposible olvidar que todo esto sucedió en medio de una pandemia y picos elevados de muertes por Covid. De hecho, Petro azuzó marchas cuando el pico de la pandemia fue más agresivo, lo que provocó que se dispararan las muertes por Covid en el transcurso de las semanas. ¿Cuántos manifestantes salieron a marchar, se contagiaron de Covid y luego contagiaron a sus padres y abuelos, provocando que otros murieran? Es una locura digna de un psicópata.

Petro es una mala persona. Es un personaje que raya en la psicopatía y que, lamentablemente, está alentando una guerra civil entre colombianos. Lo intentó en 2019 y en 2021 siendo oposición, y ahora que infortunadamente tiene el poder, parece que no desiste de su idea de ver arder a Colombia.

Que quede claro, a Gustavo Petro nadie le quiere asestar un golpe de Estado. En Colombia hay un estado de derecho y lo que las instituciones están investigando es si la campaña presidencial triunfadora de 2022 violó el artículo 109 de la Constitución rompiendo los topes de gasto durante la contienda electoral. Si las autoridades comprueban que hubo irregularidades, el presidente debe ir a juicio político sin chistar. Es lo que ordena la Constitución.

Petro debería dar gracias que en la oposición no hay pirómanos quemándole el país como sí los hubo durante el Gobierno de Iván Duque. Por fortuna, la oposición de hoy es política y civilizada que busca los mecanismos legales para hacer frente a la locura que está malgobernando a Colombia.