16/04/2024 | Por Oriana Rivas | PanAm Post

La defensa del expresidente presentó quejas por las preguntas hechas a los candidatos para el jurado de 12 integrantes. Además, el juez del caso habría aceptado a una persona partidaria de Biden

“Quiero hablar, o al menos tener derecho a responder”, exigió el expresidente republicano. (EFE)

Continúa el juicio penal contra el expresidente Donald Trump en el juzgado de Nueva York. El proceso abarca 34 cargos en su contra, por la supuesta falsificación de registros mercantiles para hacer pagos por 130.000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels y que, además, está cargado de señalamientos que buscarían sacar al exmandatario de la carrera presidencial.

En el segundo día se llevó adelante la selección del jurado. Son 12 personas en total que conformarán el panel, de las cuales seis fueron seleccionadas luego de responder un cuestionario con 42 preguntas, mientras Trump estaba sentado en el banquillo de los acusados. Pero la defensa del expresidente presentó quejas por las preguntas.

Por ejemplo, plantearon “una gran cantidad de preguntas destinadas a descartar a los partidarios de Trump”, dijo el abogado Jesse Binnall, durante una entrevista a Breitbart News. También preguntaron asuntos como: “¿Alguna vez ha asistido a un mitin de Trump?” o “¿sigue a Trump en alguna red social o lo ha hecho en el pasado?”.

Aunque con las preguntas descartan parcialidades a favor del expresidente, se supo que el juez Merchan decidió que un miembro del jurado “que hizo múltiples publicaciones celebrando la victoria de Biden 2020 puede, de hecho, ser imparcial”, reportó el periodista estadounidense Nick Sortor. Así, entre acusaciones de “cacería de brujas” hechas por el propio Trump avanza este juicio a la par de otros casos que le han costado cientos de millones de dólares al candidato presidencial republicano.

¿Juicio imparcial?

La oficina del fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg —la cual presentó inicialmente los 34 cargos— aparece nuevamente en escena porque piden que el expresidente reciba una multa de 3000 dólares por tres presuntas violaciones de la orden de silencio —impuesta en marzo— y advierten que podría enfrentarse a hasta 30 días de cárcel “si vuelve a incumplir la orden judicial”, según el expediente judicial de este martes.

Esa amenaza se da porque Trump compartió el pasado fin de semana en su red social, Truth Social, declaraciones de Stormy Daniels donde niega que los dos hayan tenido relaciones sexuales. Y es que el expresidente no puede hacer ninguna referencia a testigos, fiscales, ni jurados. Todo surgió por hacer comentarios relacionados con la presunta parcialidad del juzgado, como cuando mencionó que Loren Merchan, hija del juez del caso, dirige una firma de consultoría política que trabaja para el Partido Demócrata.

Incluso Juan Merchan figura como donante de Biden en el registro de la Comisión de Elecciones Federales (FEC, por sus siglas en inglés). Aunque el monto es de 35 dólares, hay dudas sobre su supuesta imparcialidad por ese gesto y por todas las circunstancias que lo vuelven cercano a la Administración Biden.

“Quiero hablar”

Ni la censura impuesta a Trump en este caso, ni las presiones por nuevas multas logran silenciar al expresidente republicano. El segundo día de la selección del jurado volvió a escribir en su red social reclamando contra la ley mordaza impuesta en su contra:

“Este juez conflictivo, odiador de Trump, no me permite responder a la gente que están en la televisión mintiendo y vomitando odio a lo largo del día (…) Quiero hablar, o al menos tener derecho a responder”.

Insiste con que este silenciamiento tiene un objetivo: el de interferir contra su candidatura. En paralelo, el juicio avanza entre señales de sesgos y con una maquinaria de multimillonarios cuyas donaciones apuestan a un segundo mandato de Biden en pro de seguir imponiendo la agenda progresista en Estados Unidos.