20/04/2024 | Por Un colombiano muy agradecido

Pueblo que olvida su historia está llamado a repetirla, o como en el caso de Colombia, SUFRIRLA de nuevo.

Con el llamado a juicio por parte de la fiscalía General de la nación al expresidente Uribe por manipulación de testigos y ante las recientes declaraciones de Mancuso, ahora convertido dizque en gestor de paz sobre la matanza del Aro, surgen muchísimas inquietudes

Antes de empezar, llama la atención este llamado a juicio por una supuesta compra de testigos, cuando la Fiscalía tiene una impunidad en crímenes violentos que supera el 90%.

Igualmente llama la atención el llamado a juicio del candidato uribista que compitió contra Santos, por la financiación de su campaña por parte de Odebrecht, cuando es un hecho sabido que perdió y por lo tanto le adjudico nada a Odebrecht, a la vez que se tiene prácticamente archivado el proceso contra la campaña Santos, que además de haber recibido también financiación de Odebrecht, su gobierno le adjudico billonarios contratos, hoy en entredicho y que han generado y continúa generando pérdidas de muchos billones al país. Qué contradicción tan grande.

Pero mientras los casos contra Uribe y Óscar Iván Zuluaga, avanzan a todo vapor, casos, de primera IMPORTANCIA, como las denuncias que involucran al hijo de Petro por financiación ilegal y de ilegales de la campaña de su padre, parecen durmiendo el sueño de los justos.

Más allá de esto, es inconcebible que la Fiscalía llame a juicio a un expresidente, con quien el país tiene una deuda tan MONUMENTAL, cuando hay muchos miles de crímenes mucho, pero mucho más graves, por resolver que no se mueven.

Desde cuando juzgar a un héroe nacional, por supuestos delitos de poca monta, y basados en testimonios que según las noticias carecen totalmente de credibilidad, es prioridad.

Por otro, la JEP está recibiendo el testimonio de Mancuso, que involucra a Uribe con la matanza del Aro. De nuevo, el sentido común grita que el testimonio de Mancuso, que involucra al Dr. Uribe, tiene una sombra grandísima de duda toda vez que, siendo presidente, extraditó al señor Mancuso y por lo tanto, sus testimonios huelen más a venganza que a verdad. La justicia, NO es para revanchismos.

Más allá de estas sombras, la JEP parece desconocer todas las convenciones de derechos humanos, como la de Ginebra que establece que las matanzas son consideradas delitos de lesa humanidad y por lo tanto sus crímenes no son amnistiables.

La JEP es justicia especial para la PAZ, no para dar impunidad a crímenes de lesa humanidad y menos para perseguir héroes nacionales basados en testimonios cuestionables.

A pesar de esto, NI la JEP ni la Fiscalía avanzan en llevar ante la justicia, por DELITOS DE LESA HUMANIDAD a los autores intelectuales y materiales de las principales matanzas de Colombia, que hacen palidecer a otras, como la del Faro que a decir de muchos es la más importante de los paras con aproximadamente 15 muertos.

¿Dónde quedaron las investigaciones por las matanzas de la guerrilla con número de muertos que exceden hasta por 10 veces esa cantidad, como la de La Chinita, la del Club del Nogal, la Escuela General Santander, Bojayá, (que se pretendió disfrazar con la PUERIL excusa de un error de lanzamiento de un arma EXPLÍCITAMENTE prohibida por la Convención de Ginebra), o la de Machuca que se justificó con que fue un accidente en la ejecución de una actividad prohibida, o la del Palacio de Justicia, sede de la Corte Suprema de Justicia, que muchos, aunque Petro lo quiera negar, han declarado abiertamente que fue un acto sicarial.

Valga la anotación, Carlos Castaño, en su libro, fue quizás el primero que denuncio este hecho, Popeye confirmo lo dicho por Carlos Castaño y la Corte Suprema, INEXPLICABLEMENTE, nunca ha exigido que se investigue esto a fondo. Debería ser una cuestión de honor para la Corte Suprema de Justicia que los responsables de estos hechos fueran ante la justicia y no los que defendieron al Palacio. La responsabilidad de los muertos en los actos criminales es de los criminales, NO de quienes defienden la Ley. Esto es un principio UNIVERSAL de la aplicación de la justicia.

Igualmente, estas entidades judiciales ignoran el EXECRABLE crimen llamado secuestro extorsivo de menores, crimen que pretenden disimular llamándolo reclutamiento forzado de menores, algo también prohibido, practica a la que tienen que recurrir para conseguir efectivos, ante la FALTA DE APOYO popular.

Y como si esto no fuera suficiente, pretenden darle status político a organizaciones criminales que CARECEN de apoyo y representatividad del pueblo.

La Fiscalía incapaz de aplicar justicia, como lo demuestra el altísimo grano de impunidad de los crímenes violentos y de las peores masacres de la historia colombiana, todas cometidas por la izquierda, pretende llamar a juicio, a quien SI ha hecho algo de verdad por los derechos humanos. El gobierno URIBE hizo por los derechos humanos, lo que NINGÚN premio Nobel de Paz reciente ha hecho.

Es cierto, sus acciones ocasionaron la pérdida de vidas humanas. Era IMPOSIBLE, sin pérdida de vidas humanas INOCENTES, frenar la situación que vivía Colombia antes del gobierno Uribe, la cual era una de las peores violencias de la historia reciente del mundo, justificada por una ideología que ha producido las mayores masacres de la humanidad. Este hecho es ACEPTADO como algo inevitable en la historia mundial.

Ganar una guerra, o controlar una situación de violencia como la que vivía Colombia antes de Uribe, implica un alto costo en vidas de personas inocentes. ¿Alguien ha llamado a juicio a los aliados por los miles de víctimas inocentes de sus acciones para detener a Hitler?

Los japoneses, que sufrieron las dos bombas nucleares que causaron cientos de miles de muertos, pero que a su vez salvaron más vidas de las se perdieron, en vez de sentarse a llorar y pedir que quienes las lanzaron fueran llevados ante las Cortes internacionales, decidieron, CON AYUDA de quienes las lanzó, RECONSTRUIR su economía, el resultado hoy son una de las cuatro economías más grandes del mundo.