19/04/2024 | Por Eduardo Mackenzie

La Universidad de Lille anunció este miércoles la cancelación de la conferencia sobre Palestina prevista para el jueves 18 de abril y propuesta por Jean-Luc Mélenchon, líder del partido de extrema izquierda La Francia Insumisa (LFI), con la militante franco-palestina Rima Hassan. Varios parlamentarios franceses, como la diputada macronista Violette Spillebout, el diputado Sébastien Chenu, del partido conservador Reunión Nacional, y el socialista Jérôme Guedj, habían pedido la anulación de esa conferencia. Xavier Bertrand, presidente de la región de Hauts-de-France, explicó por su parte: “No debemos permitir que los antisemitas entren ni en Lille ni en ningún lugar del país, y mucho menos en las universidades francesas”.

Rima Hassan es una candidata de LFI en las elecciones europeas del 9 de junio. El afiche diseñado por los organizadores de la conferencia causó gran indignación en la clase política pues, bajo el título de “Palestina libre”, aparece un mapa de la región en donde Israel es borrado. Para muchos ese detalle reveló el contenido y el objetivo de la conferencia en Lille: respaldar la política de la organización Hamás que, mediante el terror, pretende erradicar a Israel del Medio Oriente. Hamás preconiza la construcción de un Estado palestino “desde el río Jordán al mar Mediterráneo”.

El afiche muestra, en efecto, un territorio que abarca Israel, Cisjordania y la Franja de Gaza sin que aparezca allí traza alguna de Israel. El jefe de la lista socialista en las elecciones europeas, Raphael Glucksmann, concluyó que ese logotipo destapa la línea inaceptable de Mélenchon y LFI de “negar la existencia del Estado de Israel”.

Otra reacción aún más viva vino del historiador Georges Bensoussan quien comparó a Mélenchon con la figura más execrable de la colaboración con los nazis durante la segunda guerra mundial: Jacques Doriot, el “pequeño fuhrer francés”. Líder comunista en 1928, Doriot ingresó en 1936 en el partido popular (PPF) de tipo fascista y terminó, en 1940, militando con los petanistas y vistiendo el uniforme alemán en Francia. Antisemita rabioso, Doriot enviaba a sus militantes a animar a la policía durante las redadas y deportaciones de judíos hacia los campos de muerte nazis.

La Francia Insumisa insulta las operaciones defensivas israelíes contra Hamas al definirlas como una “operación genocida”. Rima Hassan describe a Israel como una “entidad colonial fascista”. Pocos olvidan que, ante la pregunta de un periodista “¿Las acciones de Hamas son legítimas?”, ella respondió: “Eso es cierto”.

Además de la universidad de Lille, la prefectura del Nord-pas-de-Calais también prohibió la conferencia sobre Palestina. Furioso, Mélenchon decidió realizar su reunión en otro lugar de Lille y denunció “un abuso de poder digno de una república bananera”. El coordinador de LFI, Manuel Bompard, estimó que “el deseo de quienes atacaron la organización de esta conferencia es silenciarnos”. Rima Hassan agregó: “Prohibir una conferencia por ese logotipo es ridículo”. Empero, directivos de la universidad explicaron que el aumento de tensiones internacionales, desde del masivo ataque de misiles y drones de Irán contra Israel, el pasado 13 de abril, no permitirá la “serenidad de los debates”.

Jean-Luc Mélenchon multiplicó entonces, en algunas universidades, sus arengas sobre la cuestión palestino-israelí. Algunos voceros de izquierda apoyaron su diatriba contra la universidad de Lille y LFI señaló que el logotipo cuestionado “no niega en modo alguno la existencia de Israel” y que ellos “nunca han promovido el odio antisemita”. Lo que no es cierto. Mélenchon no condenó la matanza antijudía del 7 de octubre de 2023 que dejó más de mil muertos, dos mil heridos y más de un centenar de secuestrados. Por el contrario, la justificó como una “ofensiva armada de fuerzas palestinas” en un contexto de “intensificación de la política israelí de colonización de Gaza, Cisjordania y Jerusalén”. Tal enfoque desató una fuerte indignación en la clase política francesa. La senadora socialista Laurence Rossignol reaccionó contra Mélenchon: “Decir que los judíos son responsables de lo que les ocurre es una característica del discurso antisemita”.

Rima Hassan, después del terrible pogrom, también se abstuvo de calificar a Hamas como terrorista y dijo, en cambio, que sólo era una organización de “resistencia” contra “el ocupante israelí”. Nadie olvida que ante la pregunta reciente de un periodista “¿Las acciones de Hamas son legítimas?” ella respondió: “Eso es cierto”.

Esas posturas de LFI son ampliamente rechazadas. El secretario general del Partido Comunista, Fabien Roussel, afirmó que Rima Hassan “lleva a cabo un proyecto que no aporta una solución política y de paz”. El presidente de los diputados del partido centrista Renacimiento en la Asamblea Nacional, Sylvain Maillard, calificó la elección de esa candidata de “absoluta vergüenza” y lo “más execrable” que había hecho LFI. Mélenchon, de hecho, es el político más reprobado en Francia en este momento.

La evolución de Mélenchon y su partido debería llamar la atención de los colombianos. Mélenchon dice tener excelentes relaciones con Gustavo Petro. Las posturas de ambos personajes sobre Israel y el 7 de octubre han sido muy cercanas si no idénticas. El 21 de julio de 2022, Mélenchon dijo haberse reunido con Gustavo Petro en Bogotá tras la elección presidencial. En un largo y confuso texto de esa fecha, el jefe de LFI saludó a Petro como un buen “antiimperialista”, “anticapitalista” y “ecologista” pero deploró haber descubierto, durante su gira por México, Honduras y Colombia, que esos tres gobiernos rechazan su idea del “choque frontal contra el imperialismo norteamericano” y que cada uno busca un “punto de equilibrio” con el gobierno de Joe Biden. Eso no dispensó al jefe supremo del islamo-izquierdismo francés de insistir en lo del “choque frontal”: “promulgar nuevas constituciones” y “cambiar todo de una vez”. Mélenchon espera ver a sus adeptos latinoamericanos seguir sus lunáticas recetas. Petro está tratando de hacerlo.