7/03/2024 | Red + | Por Andrés Botero Benavides

Desde la Asociación Colombiana de Droguistas Detallistas (ASOCOLDRO) están denunciando varias irregularidades, entre ellas, “la venta ilegal de medicamentos institucionales”.

Description: Cartel en unas droguerías denuncia agremiación de droguistas. Foto: Getty Images
Cartel en unas droguerías denuncia agremiación de droguistas. Foto: Getty Images

Inicialmente, era otro el tema el que se quería tratar con los voceros de Asociación Colombiana de Droguistas Detallistas (ASOCOLDRO), luego de que la senadora Paloma Valencia expusiera en un post desde su cuenta de X un futuro problema que podría afectar la salud de la mayoría de los colombianos.

Sin embargo, y en medio del diálogo con el Dr. Greison Camargo, subdirector Servicios Jurídicos de esta agremiación, poco a poco se fueron destapando una serie de irregularidades que no afectarían a los colombianos, sino que de una u otra manera, ya les está ‘pasando factura’.

El vocero de la agremiación, que reúne a 5.900 droguistas y 11.700 droguerías en todo el territorio nacional, denunció un supuesto ‘cartel’ del que harían parte algunos comercios, y que se estarían beneficiando gracias a que las droguerías prestan un servicio tanto comercial como institucional, respectivamente.

Advierte que el tema a tratar ha sido llevado a la propia mesa del Ministerio de Saludy que, de su mano, ambas instituciones están buscando alternativas para acabar con lo que él mismo ha denominado un “caldo de cultivo a la corrupción”.

“Otro tema que realmente nos está golpeando es permitir que en una droguería estén los dos canales: el comercial e institucional. En Colombia, los medicamentos de uso institucional son los que se entregan a través del sistema de seguridad. Pero también están los comerciales, o sea, los que venden en estos locales.”

¿Pero cuáles son los hallazgos?

El Dr. Greison Camargo señala que, después de muchas averiguaciones, han encontrado los siguientes casos en este punto:

  1. “Una persona llega con su fórmula médica a la droguería a reclamar su medicamento expedido por un médico de la EPS, y lo que hacen, es decirle que no lo hay, pero a su vez se lo ofrecen en venta”.
  2. “Cuando el médico expide una fórmula médica para reclamar una droga de alto costo, el usuario llega a reclamarlo y lo que hacen es cruzarlos, entregando a la persona el medicamento más económico y apropiándose del institucional caro, el cual terminan vendiendo comercialmente. Esto se ha convertido en un caldo de cultivo a la corrupción”.
  3. “La investigación que hemos hecho ha sido tan avanzada que hemos identificado qué hay médicos que están expidiendo fórmulas sin que ni siquiera el usuario haya solicitado o asistido a las citas. El tema es muy delicado, y lo que lo crea es esa mezcla de ambos canales en un solo sitio”.
  4. El directivo agremiado solicita de manera urgente que se separen los canales: “Si una empresa se va a dedicar a operar y a dispensar medicamentos de uso institucional, que solamente se dedique a eso, y seguro, se acaba con esta corrupción”.
  5. Y sentencia: “La comercialización de medicamentos ilegales, fraudulentos y de uso institucional es más rentable que el narcotráfico que hay en este país por la cocaína o alguna otra sustancia. Y es tan rentable, que lo tienen tan oculto porque sencillamente no hay persecución y no hay control alguno sobre los medicamentos. Por eso, hay que poner la lupa, poner en cintura y controlar la creación de nuevas droguerías”.

Otras anomalías

Desde ASOCOLDRO han detectado otros temas delicados que se han expuesto al Ministerio de Salud, sin lograr a hoy respuestas contundentes.

Camargo señala lo que desde hace meses se ha venido exponiendo en diferentes medios y es el desabastecimiento de medicamentos.

Otro punto es la facilidad con los que los niños, niñas y adolescentes en el país tiene para acceder a medicamentos de alta complejidad, ya que están mezclando fentanilo y ketamina con el mareol, creando una droga sintética que ya ha cobrado la muerte de muchos menores de edad en toda Colombia.

“En estos temas es que realmente el Gobierno debería poner la lupa porque se trata de una afectación a la salud pública del país.”

Actualmente, en las tiendas, en las panaderías y hasta en los kioscos de la esquina, se encuentran medicamentos, lo que la agremiación considera “una irresponsabilidad de todos”, ya que eso lleva a que los menores de edad tengan asequibilidad a esta clase de medicamentos.

“Una persona dueña de una tienda, de un supermercado o de una panadería no cuenta con el conocimiento ni la preparación suficiente para poder dispensar un medicamento en el país. Estamos solicitando que solo sean los sitios regulados, pues así venía desde el decreto 1950 de 1964 en el artículo 110. Esto es una responsabilidad y lo conocemos a nivel mundial.”

Recalca que se debe comenzar a reorganizar y controlar a quien va a poner una droguería, autorizar y luego hacer un ejercicio y es el de profesionalizar aún más a las personas dedicadas a este oficio.

“Hoy en día cualquier persona puede montar una droguería, y esto no puede suceder más. En Colombia no se permitía una droguería a menos de 75 metros de la otra. Por medio del decreto 019 de ley 2012 en el artículo 136 o más conocidos como la ley antitrámites lo que hicieron fue quitarle la competencia al Ministerio de Salud para que autorizara la apertura de nuevos locales.”

¿Qué se necesita para abrir una droguería?

El líder agremiado señala que lo que expone la senadora Paloma Valencia no es tan cierto como lo está manifestando. No habla nada de apertura de nuevas droguerías, a lo que realmente se refiere es no expedir nuevas credenciales de expendedores de drogas.

Para que una droguería o farmacia pueda funcionar, obliga la ley que debe contar con un director técnico que se encarga de los procesos y procedimientos de la misma.

Pero también la ley enmarca dentro del decreto 780 de 2016 las categorías para que haya un director técnico. ¿Pero quién puede ser un director técnico de una droguería? Un químico farmacéutico, un regente en farmacia, un director de droguería, un licenciado farmacéutico o un expender de drogas.

“Estamos trabajando con el Ministerio de Salud para profesionalizar y llevarlos de ser expendedores de drogas, porque así está registrado en el decreto 780, a regentes en farmacias, un oficio más técnico y avanzado para llegar a profesionalizar al personal.”